El Vaticano pública una guía y pone reglas específicas sobre matrimonios mixtos e intercomunión para acercar a los cristianos divididosEl papa Francisco insta para que el compromiso ecuménico del obispo no sea una opción, sino un deber y una obligación. El objetivo es demostrar humanidad y caridad “con los hermanos que no estén en comunión plena con la Iglesia católica”.
El Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos publicó el documento: “El obispo y la unidad de los cristianos: Vademécum ecuménico“.
Se trata de una guía para el viaje ecuménico del obispo junto con su diócesis, explico el Cardenal Kurt Koch, presidente del dicasterio vaticano, el 4 de diciembre de 2020, en la sede de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
También hay recomendaciones sobre cómo tratar a los matrimonios mixtos, las oraciones comunes, la intercomunión, elementos de reflexión en países de mayoría protestante, pero donde se necesitaba una brújula.
Más de 30 páginas preparadas en tres años de trabajo. “El servicio de la unidad es un aspecto esencial de la misión del obispo”, el papa Francisco ha expresado la esperanza de que el Vademécum sirva de “estímulo y guía” para el ejercicio de las responsabilidades ecuménicas de los obispos.
Francisco sigue la herencia del Concilio Vaticano II y de la encíclica de Juan Pablo II “Que todos sean uno” (1995).
En la introducción se advierte que la unidad no significa una “solución de compromiso” a expensas de la verdad, sino “una valoración más plena de la verdad revelada por Dios”, se lee en el documento.
Comisión diocesana de ecumenismo
Entretanto, se recomienda que el obispo nombre un delegado diocesano para el ecumenismo, que debe ser su estrecho colaborador y consejero en los asuntos ecuménicos.
Además, se solicita, donde la diócesis sea grande y se requiera, que se forme una comisión episcopal para el ecumenismo (DE 46-47). “Estos obispos han de ser asistidos por un equipo de consultores expertos y, si fuese posible, por un secretariado permanente”.
Páginas web de las diócesis
La guía ecuménica señala el uso de los medios de comunicación y de las páginas web de las diócesis. “La falta de comunicación mutua a lo largo de los siglos ha agudizado las divergencias entre las comunidades cristianas”.
Por ende, los esfuerzos para fomentar y fortalecer la comunicación pueden desempeñar un papel clave para acercar a los cristianos divididos.
Matrimonios mixtos
Las migraciones han acentuado esta realidad. En el documento (n. 35) se lee que el obispo diocesano está llamado a autorizar los matrimonios mixtos entre católicos y otros cristianos bautizados y, a veces, a conceder una dispensa de la forma canónica y que los matrimonios mixtos “no deben considerarse como problemas, ya que a menudo son un lugar privilegiado donde se construye la unidad de los cristianos”.
Asimismo, “la praxis sobre los matrimonios mixtos, el bautismo de hijos nacidos de tales matrimonios y su formación espiritual varía mucho de una región a otra[14]. Por eso, es necesario fomentar los acuerdos locales sobre estas preocupaciones pastorales tan apremiantes”, afirma el texto, entre otras recomendaciones.
Eucaristía
La administración y recepción de los sacramentos, especialmente la eucaristía, en las respectivas celebraciones litúrgicas, sigue siendo un área de serias tensiones en las relaciones ecuménicas. Al obispo se advierte que “los sacramentos nunca deben ser compartidos por mera cortesía. La prudencia debe ejercerse para evitar confusión o el escándalo entre los fieles”.
Pero, por ejemplo, en caso de peligro de muerte, o si el obispo diocesano juzga que hay “grave necesidad”, los ministros católicos pueden administrar los sacramentos a otros cristianos “que lo pidan espontáneamente, con tal de que profesen la fe católica respecto a esos sacramentos y estén bien dispuestos”.
Cambio de afiliación eclesial:
“[….]Las comunidades locales deben acoger con alegría a aquellos que deseen entrar en plena comunión con la Iglesia católica, aunque como dice el Ritual de Iniciación Cristiana de Adultos: “debe evitarse cuidadosamente cualquier manifestación de triunfalismo” (311).
Manteniendo siempre un pro-fundo respeto por la conciencia de las personas afectadas, quienes manifiestan su intención de abandonar la Iglesia católica deben ser conscientes de las consecuencias de su decisión.
Ecumenismo espiritual
El cardenal Koch, explicó que la primera modalidad de trabajo es la del ecumenismo espiritual, sobre la importancia de la Sagrada Escritura, del “ecumenismo de los santos”, de la purificación de la memoria.
La segunda es el diálogo de la caridad, que se ocupa de promover una “cultura del encuentro” a nivel de contactos y colaboraciones cotidianas, alimentando y profundizando la relación que ya une a los cristianos en virtud del bautismo.
Por ejemplo, asistir, en la medida de lo posible y apropiado, a las liturgias de ordenación o inauguración de los responsables de otras Iglesias, invitar a los responsables de otras Iglesias a las celebraciones litúrgicas y a otros acontecimientos significativos de la Iglesia Católica.
La tercera modalidad es el diálogo de la verdad, que se refiere a la búsqueda de la verdad de Dios que los católicos emprenden junto con otros cristianos a través del diálogo teológico.
La cuarta modalidad es el diálogo de la vida. Esta expresión designa las oportunidades de intercambio y colaboración con otros cristianos en tres campos principales: la atención pastoral, el testimonio ante el mundo y la cultura.
Aniversario Concilio Vaticano II
El el cardenal Card. Kurt Koch, afirmó que la publicación del Vademécum Ecuménico marca no sólo el veinticinco aniversario de la Encíclica Ut unum sint, sino también: el 60º aniversario de la creación del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, tras el anuncio del Concilio Vaticano II.
Aquí el enlace al documento completo