El papa Francisco ha dado un espaldarazo al movimiento scout para que siga trabajando por una Iglesia más “extrovertida” que ayude a los jóvenes y contribuya a construir un mundo más humano. También destacó la formación cristiana enfocada en dar valor a las relaciones, la belleza de la familia y el cuidado del medio ambiente.
Hoy, en el Palacio Apostólico Vaticano, el papa Francisco ha recibido en Audiencia a la Delegación de los Scouts Unitarios de Francia con motivo del 50º aniversario de su fundación.
“En la sociedad, encontramos con demasiada frecuencia una degradación de las relaciones humanas y una falta de modelos fiables para los jóvenes que buscan formación”.
Y remarcó que la actual crisis sanitaria ha agudizado el problema de las relaciones por la reducción de “las posibilidades de reunirse para confraternizar y forjar nuevas amistades”.
“Frente a todas estas dificultades, su movimiento scout es un signo de aliento para los jóvenes, porque les invita a soñar y a actuar, a tener el valor de mirar al futuro con esperanza”.
Francisco consideró positivamente la pedagogía scout “del hermano mayor que protege y acompaña a los más pequeños, ayudándoles pacientemente a descubrir y hacer fructificar los talentos recibidos del Señor”.
Esta pedagogía muestra cómo "todos necesitamos experimentar relaciones humanas reales y no sólo virtuales, especialmente en la edad en que se forman el carácter y la personalidad”.
“Y estoy especialmente agradecido a las parejas que les apoyan y que dan testimonio entre ustedes de la belleza del matrimonio”, agregó.
“El scout, con su voluntad de servir al prójimo, también está llamado a trabajar por una Iglesia más "extrovertida" y por un mundo más humano!”.
Entonces, invitó a “potenciar la riqueza de las relaciones humanas y hacer de ellas un bien común que ayude a la renovación social”.
Por lo tanto, les instó “a ser tanto cristianos dinámicos como scouts fieles”. Y a ser coherentes con sus valores basados en el Evangelio, con un espíritu de apertura a los demás.
“Gracias a su relación con la naturaleza, llevan el mensaje de que el respeto a los demás y al medio ambiente van de la mano”.
El Papa les animó a no desanimarse por el “egoísmo del mundo”, a no encerrarse en ellos mismos, “a no ser jóvenes inertes, sin ideales y sin sueños”.
“No pierdan nunca de vista que el Señor les llama a todos a llevar sin miedo el anuncio misionero allí donde estén, especialmente entre los jóvenes, en vuestros barrios, en el deporte, cuando salen con los amigos, en el voluntariado y en el trabajo”.
Les animó a ser “sembradores de esperanza y de redescubrimiento de la vida comunitaria”.
Además, les invitó servir “a los jóvenes a convertirse en personas libres y responsables, respetuosas con los demás y con su entorno”.
Por ultimo, confió a los Scouts de Francia a la protección maternal de la Virgen María.
En este contexto, el Papa dijo agradecer al Consejo para la Pastoral de la Infancia y la Juventud de la Conferencia de Episcopal de Francia.
Y señaló a “los jóvenes scouts, como protagonistas de la evangelización y de la construcción de la sociedad”.