Brasil se acerca al trágico número de 500 mil personas víctimas del nuevo coronavirus. En este contexto de dolor y necesidad de esperanza y consuelo, la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) prepara oraciones, homenajes y movilizaciones sociales para recordar a los numerosos brasileños muertos y subrayar el mensaje de que "toda vida cuenta".
El sábado 19 está programada una misa en Río de Janeiro, mientras que todas las diócesis serán invitadas a tocar las campanas a las 3 pm, hora de la Misericordia.
La Misa será presidida por Mons. Joel Portella Amado, Auxiliar de la Arquidiócesis de Río de Janeiro, quien dijo: “es un acto de solidaridad, de esperanza, de compromiso, tratar de hacer un poco mejor Brasil”. Todas las personas que, de alguna manera, tienen la más mínima sensibilidad en el corazón deben detenerse en este momento a reflexionar, "500 mil es un número simbólico, pero en cualquier caso medio millón de personas son muchas", señaló el obispo.
Imágenes de los numerosos manifestantes que salieron a las calles hace menos de 15 días para pedir la destitución del presidente Jair Bolsonaro, responsable de una gestión de la pandemia definida como "desastrosa" que convirtió a Brasil en uno de los epicentros del Covid-19 y ha provocado hasta el momento la muerte de más de 490 mil personas, registrándose 17 millones y medio de contagios.
Actualmente el 10% de la población está vacunada. Las manifestaciones, las más impactantes desde el inicio de la emergencia sanitaria, fueron organizadas por partidos de izquierda y por asociaciones sindicales y estudiantiles en numerosas ciudades, desde São Paulo a Belo Horizonte, desde Recife a la capital Brasilia, hasta decenas de pequeños pueblos de todo el país.
El presidente brasileño, a su vez, dijo la semana pasada que el número real de muertes por coronavirus en el país podría ser el 50% de la cifra oficial. "Les doy una noticia de primera mano: el Tribunal de Cuentas no confirma la cantidad de muertes por Covid el año pasado; alrededor del 50% de las atribuidas al virus en realidad no lo serían", dijo el Jefe de Estado, según lo que fue reportado por agencias de noticias.
Brasil está en el centro de la atención de los medios mundiales por la situación de Covid y la mala gestión de la pandemia. La crisis de salud tiene serias implicaciones políticas: se han presentado a la Cámara de Diputados más de setenta solicitudes de juicio político para el presidente Bolsonaro, pero hasta el momento ninguna ha sido respondida.
La Iglesia Católica ha alzado su voz en numerosas ocasiones para denunciar esta situación. El momento actual requiere competencia y claridad, por lo que "los discursos y actitudes que niegan la realidad de la pandemia, ignoran las medidas sanitarias y amenazan el estado de derecho democrático, son inaceptables", dijo la Conferencia Episcopal (ver Fides 17/04/2021).
Entre las numerosas posiciones tomadas por obispos individuales en este período de pandemia, tenemos recientemente el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Belo Horizonte, Vicente de Paula Ferreira, que utilizó las redes sociales el lunes 14 de junio para expresar una vez más su decepción por la labor del presidente Bolsonaro. “Tú que entraste a Jerusalén en un burro, danos el valor para enfrentar al tirano que mata a nuestro pueblo. Líbranos, Señor, del mal gobierno de la muerte. Este peso Señor, es demasiado pesado ”, escribió el obispo.
Monseñor Vicente de Paula Ferreira, que es doctor en Ciencias de la Religión por la Universidad Federal de Juiz de Fora (UFJF), posdoctorado en Teología por la Facultad de Filosofía y Teología de los Jesuitas (FAJE).
Se licenció en Filosofía por la UFJF y en Teología por la FAJE. Autor de varias obras, miembro de la Sociedad de Estudios Psicoanalíticos Juiz de Fora, fue formador de estudiantes redentoristas en su teologado en Belo Horizonte. El Obispo ha estado muy cerca de las comunidades de la zona en el momento de la tragedia de Brumadinho, cuando se rompió la presa Córrego do Feijão que causó cientos de víctimas.