“Inédito e histórico”. Así fue calificada la firma del Convenio de Cooperación Técnica (ACT) entre la Iglesia de Brasil y la entidad vinculada a la conservación del patrimonio en el “gigante sudamericano”.
El objetivo ha sido establecer una alianza para la preservación y valorizaciones del patrimonio cultural bajo la gestión de la Iglesia católica en Brasil, recuerda un reciente artículo difundido por la CNBB.
Es ahí, entre los bienes culturales contemplados, donde ingresan iglesias, conventos, residencias y colecciones de arte sacro. Al mismo tiempo, el acuerdo contó con el lanzamiento de un sello creado para celebrar la asociación.
Quien también se refirió al alcance de este acuerdo, que tiene una vigencia de tres años, fue el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Río de Janeiro y secretario general de la CNBB, monseñor Portella Amado.
Los bienes culturales, históricos y artísticos de la Iglesia católica en Brasil se posicionan con fuerza. Esto como no podía ser de otra manera en uno de los países más católicos del continente.
Es ahí donde ingresa una clara división. Va desde los bienes materiales como inmuebles (capillas, iglesias, monasterios o catedrales), pasando por bienes integrados como altares, pilas bautismales, hasta bienes culturales muebles. Por ejemplo, imágenes de madera, crucifijos, pinturas, objetos litúrgicos. Luego los bienes culturales inmateriales, algo que tiene que ver con la forma de celebrar o diversas tradicionales típicas de procesiones, celebraciones de santos, etcétera.
Todo esto en base a precisiones realizadas por el estudiante de doctorado en Entorno Construido y Patrimonio Sostenible y Restaurador Conservador de Bienes Culturales Muebles, Dener Chaves.