El acceso cada vez más temprano de niños y jóvenes a las redes les expone a ello y en muchos casos acaban normalizándolo en su conducta. Los padres son fundamentales en la guía de sus hijos también en redes sociales. Estos tests de la experta Anna Plans te ayudarán en el diagnóstico.
"Las redes sociales se han convertido en la carta de presentación de los menores. Por eso, para muchos, un perfil de Instagram dice más que preguntarle a alguien ¿quién eres? o ¿qué es de tu vida?".
Partiendo de esta premisa, Anna Plans – experta e investigadora del impacto de las tecnologías en adolescentes – alerta del riesgo que supone la necesidad de obtener ‘me gustas’ como forma de autovalidación de la identidad personal.
Es en ese momento cuando chicos y chicas empiezan a subir fotos atractivas para aumentar la popularidad, cayendo en la hipersexualización de las redes, entendida como "resaltar los atributos sexuales por encima de cualquier cualidad que pueda definir a la persona".
Los expertos en educación digital alertan de la creciente tendencia a encontrar contenido en las redes donde los menores adoptan roles sexualizados propios en adultos, "en una etapa en la que no está ni emocional ni psicológicamente preparados para ello".
Plans lo explica así: "el cerebro de niños y adolescentes es plástico. La exposición continuada a este tipo de conductas nos hace aprenderla, igual que un bebé aprende a hablar. Así un adolescente normaliza este tipo de fotos y sube a Instagram fotos suyas similares".
Los efectos pueden ser demoledores: "condiciona la autoestima, anorexias, bulimias, depresiones, fobias sociales e incluso suicidios". Al basar la autoestima en la percepción que tienen los demás, puede condicionar la elección de amistades y hasta parejas tóxicas.
Anna Plans, junto con la Fundación Aprender a Mirar, han elaborado unos test para dotar a los padres de una herramienta de diagnóstico y que sea un punto de partida para hablar con los hijos de este tema.
"Los padres son los que mejor van a orientar al menor sobre las redes sociales y sus consecuencias". Son el #HiperTestKid para niños de hasta 12 años, y el #HiperTestTeen, hasta 17 años. Ambos se hacen a partir de alguna foto que hayan publicado los hijos en redes sociales.
En el caso de que haya salido un resultado que revela exceso de hipersexualización, desde esa Fundación y la propia experta hacen algunas recomendaciones para los padres: