“Estaba oscuro. No se veía nada. Era las 4:20 a.m. Nosotros (la embarcación) nos hemos metido dentro de las casas. Ellos bajaban (el bote motor) y nosotros subíamos. Al momento de impactar, en un par de segundos caímos. La mayoría no sabe nadar y había niños. Yo me he salvado y salvé a mi hijo. He perdido a mi esposa y a mi otro hijo de 7 años”.
Así se expresó uno de los sobrevivientes de la tragedia entre dos embarcaciones en el río Huallaga, testimonio recogido por el medio local El Comercio.
El colapso se dio en la madrugada del domingo en la provincia de Altos Amazonas, en la región de Loreto, y dejó al menos 15 fallecidos (datos actualizados al 1 de septiembre), además de heridos y desaparecidos.
Es que en base a testigos, una de las embarcaciones naufragó con 80 pasajeros, entre los cuales había unos 20 niños. En medio de este complejo escenario, desde la Marina de Guerra del Perú se realizaban en las últimas horas tareas de búsqueda y rescate
Según añade El Comercio, la embarcación, conocida como barcaza, había recogido en la madrugada a las 80 personas de “diferentes congregaciones religiosas” que habían asistido el sábado a una vigilia en el denominado caserío de Santa María Bajo Huallaga. Posteriormente, medios como Agencia Andina especificaron que la mayoría eran miembros de la congregación religiosa Nueva Jerusalén.
Minutos después de las 4 am aconteció el choque con el bote a motor, generando que se partiera la embarcación y posterior naufragio. Mientras tanto, las investigaciones preliminares de las causas del accidente continuaban.
En las últimas horas, luego de conocido lo sucedido, desde la Parroquia San Martín de Porres, en el Vicariato Apostólico de Iquitos, se acompañó el dolor de las familias y se ofreció una oración “por los hermanos cristianos que perdieron a sus seres queridos en el accidente fluvial” en esa zona de Perú.
“Dios, Padre de todos, les da fuerzas en estos momentos tan difíciles”, se publicó en Facebook.
En la madrugada de este martes 31 de agosto Perú volvió a lamentar la muerte de personas en una tragedia, esta vez en tierra y en una zona de Lima. En este caso, indican medios locales, unas 17 personas perdieron la vida tras el despiste y caída de un bus a un abismo de más de 200 metros en carretera Central (número que se elevó a 29). La situación generó también decenas de heridos que fueron trasladados a hospitales cercanos. Un motivo más para seguir rezando por estas personas y sus familias.
Este 1 de septiembre la propia CEP elevó un mensaje de oración y cercanía por los fallecidos tanto en el choque de embarcaciones, así como en Carretera Central, además de otro accidente en Apurímac.
"Compartimos el dolor, especialmente de los familiares de las víctimas y pedimos a nuestro Padre Dios y a la Santísima Virgen María los tengan gozando de su Divina Presencia. Del mismo modo, transmitimos nuestra cercanía a los heridos que se encontraban en los vehículos siniestrados para que encuentren una pronta mejoría en los centros de salud hasta donde han sido trasladados", expresaron. Ver mensaje completo aquí.
Actualizado 1 de septiembre