separateurCreated with Sketch.

El tamal de Pachito, una historia que debes leer

whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Claudio de Castro - publicado el 29/09/21
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Un hombre necesitado pidió a una mujer algo de comer y su forma de pedir le enseñó algo sobre la oración que todos tienen que saber

Nos encanta que escriban a Aleteia. No hay nada más gratificante que compartir con nuestros lectores y que compartan con nosotros su fe, sus ilusiones, sus anhelos y esperanzas. Cada carta o email que llega la leemos con atención, como si fuese la única. 

En ocasiones nos sorprenden los correos. Son tan agradables y edificantes que vale la pena compartirlos, darlos a conocer.

Este es el caso de la historia de Pachito que hace unos días recibimos desde Bogotá, Colombia.

Fue en un correo de Claudia Elena Rodríguez. Su relato era tan simpático y edificante que no me pude resistir a compartirlo con ustedes.

Pachito es un habitante de la calle, de unos 45 años, que pide limosna en las frías calles de Bogotá.

Una tarde dominguera, al salir de misa, lo vi sentado en el piso, alargando su mano sin recibir nada. Cuando pasé delante, se levantó y me dijo:

─Usted sí me va a ayudar, ¿cierto monita? Por favor, diga que sí… es que tengo unas ganas de un tamal (arroz con  guiso de pollo, cerdo y verduras, cocido en hoja de plátano)… Diga que sí, yo sé que usted puede… ¿sí?

Me sonreí y supo que me había conquistado. Entonces  caminé hacia el supermercado cercano, con Pachito al lado, dándome claras instrucciones:

─Cómprelo arriba (en la cafetería) para que lo calienten… y con una gaseosita. Gracias monita, yo la espero aquí.

Y así fue como conocí a Pachito.

Él, que seguramente lleva muchos años pidiendo en la calle y sabe perfectamente cómo es que uno logra lo que necesita, me dio una clase magistral. Me enseñó:

1Que se pide con humildad

“Por favor diga que sí”, dijo en tono de súplica.

2Que se pide con perseverancia y gratitud

Caminó al lado mío hasta que entré en el supermercado, dándome las gracias anticipadamente.

3Que se pide con fe

“Yo sé que usted puede”, fue su frase contundente.

Pero sobretodo, Pachito me enseñó que se pide con ganas: “es que tengo unas ganas de un tamal”... dijo saboreándose y ponderando lo sabroso de los tamales que allí venden, al punto que yo también me antojé del tamal.

Me quedé pensando que muchas veces eso es lo que falta en mis oraciones de petición, ¡echarle ganas!

Me autoanalicé y pensé que tal vez por cansancio, conformismo, apresuramiento, una fe débil, o todas las anteriores, muchas veces pido desganadamente, con el mismo entusiasmo con que me cepillo los dientes, y así no se pide.

Debemos pedir como Pachito, con hambre, con ganas fervientes de ser escuchados y atendidos por el Señor,  que es un Padre generoso con los bolsillos llenos de gracias para darnos.

Después de todo las Sagradas Escrituras nos dicen: "… hay que pedir con fe, sin vacilar" (Santiago 1, 6)

Espero que hayamos aprendido de la historia. Es cierto lo que nos dice, hay que echarle ganas a la oración, perseverar, sin rendirnos ni desanimarnos. Decía el Padre Pío que “la oración es la llave que abre el Corazón de Dios.”

Quedamos con ganas de probar ese tamal.

Un saludo fraternal a todos los hermanos y hermanas colombianos y a nuestros lectores alrededor del mundo.

Desde Aleteia les deseamos la santidad que Dios nos pide. Seamos todos hermanos, y  santos para Jesús.

¡Dios te bendiga!

Thumbnail for read also
Te puede interesar:Reconocerse pobre ante Dios
¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.

banner image
Top 10
See More
Newsletter
¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.