No obstante los jefes de los pueblos originarios de Canadá ya tengan pactada una entrevista con el Papa Francisco en el mes de diciembre próximo, los obispos canadienses deslizaron la posibilidad de que Francisco realice “un viaje de sanación” a ese país.
En un comunicado tras la asamblea plenaria anual de la Conferencia de Obispos Católicos de Canadá (CCCB, por sus siglas en inglés), los prelados reconocieron sin ninguna cortapisa ni justificación “el sufrimiento experimentado en las escuelas residenciales indias de Canadá".
Los prelados canadienses reconocen en su comunicado que diversas escuelas residenciales operadas por órdenes religiosas y diócesis católicas participaron en este sistema, que llevó a la supresión de las lenguas, la cultura y la espiritualidad indígenas, sin respetar la rica historia, tradiciones y sabiduría”.
A partir de mayo de este año, iniciando con el internado de Kamloops (Columbia Británica), en algunas de estas escuelas se han encontrado más de mil fosas en las que yacen niñas y niños indígenas en tumbas sin nombre, lo que ha provocado un gran escándalo en Canadá.
Los obispos reconocieron “los graves abusos cometidos por algunos miembros de nuestra comunidad católica: físicos, psicológicos, emocionales, espirituales, culturales y sexuales.
"También reconocemos con pesar el trauma histórico y continuo y el legado de sufrimiento y desafíos que enfrentan los pueblos indígenas que continúa hasta el día de hoy", expresaron los prelados canadienses
Una delegación de sobrevivientes indígenas, ancianos / guardianes del conocimiento y jóvenes se reunirá con el Papa Francisco en diciembre.
"El Papa Francisco se encontrará y escuchará a los participantes indígenas, para discernir cómo puede apoyar nuestro deseo común de renovar las relaciones y caminar juntos por el camino de la esperanza en los próximos años", dice el comunicado de la CCCB.
"Nos comprometemos a trabajar con la Santa Sede y nuestros socios indígenas sobre la posibilidad de una visita pastoral del Papa a Canadá como parte de este viaje de sanación", terminaron diciendo en el comunicado los obispos tras su asamblea anual.