Son varias las reliquias de Jesús a las que hoy podemos venerar, muchas de esas tienen que ver con su Pasión.
Según la tradición, muchas de las reliquias de Cristo fueron encontradas en Jerusalén por santa Helena, madre del emperador Constantino, en el siglo IV.
Entre ellas están: la Cruz, los clavos, la columna de la flagelación, la corona de espinas, la escalera santa, entre tantas.
Digamos que la lista de las reliquias de la Pasión es extensa, sin embargo aquellas de Jesús cuando era niño, no son muchas.
Estas son algunas de las reliquias, que según la tradición, pertenecieron al Niño Jesús:
El santo prepucio
Del Santo Prepucio, se tiene las primeras fuentes en los escritos apócrifos de El Evangelio árabe de la infancia.
¿Qué sucedió después?
No se supo nada hasta el año 800, cuando Carlomagno lo donó al papa León III con ocasión de su coronación como Emperador del Sacro Romano Imperio, la noche de Navidad.
El papa lo mandó a custodiar dónde se encuentran muchas de las reliquias importantes del cristianismo en el Sancta Sanctorum, donde está la Escalera Santa.
En el 1527 los Lansquenetes robaron las reliquias; y cuando estos pasaron por Calcata, ciudad a 35 km de Roma, uno de estos lansquenetes, que había robado la reliquia, fue apresado.
Este escondió el relicario con el prepucio en la celda; hasta que fue descubierto, después de 30 años, en 1557.
Desde entonces se hizo famoso y lo sacaban en procesión todos los años, el 1 de enero, día de la Circuncisión.
También es cierto que otros Santos Prepucios se veneran también en otras partes de Europa, un total de 14, y la credibilidad se vuelve un poco complicada... ¿verdad?
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El santo pañal
La reliquia llamada ‘panniculum’, era un pequeño trozo de tela proveniente de uno de los pañales de Jesús; durante varios años los romanos llevaron en procesión desde la basílica de Santa María Mayor para el Día de los Inocentes, 28 de diciembre. Con el tiempo esta costumbre se perdió.
Otro pañal considerado auténtico en Italia, se encuentra en la catedral de Spoleto, y suele ser exhibido para la Nochebuena.
Pero no son los únicos, la catedral de Lleida en España, hospedó por un tiempo un "Santo Pañal". Aquí puedes leer su historia:
Otro santo pañal se encuentra en la Catedral de Dubrovnik. La reliquia se exhibe en un voluminoso relicario de plata, adornado con figuras aladas, arabescas y otros elementos decorativos.
La Sagrada Cuna
La Sagrada Cuna se encuentra en la Basílica de Santa María Mayor.
Se cree que las reliquias de la cuna fueron enviadas por san Sofronio de Jerusalén, al Papa Teodoro I (642-649), de origen oriental; quería protegerla de peligros originados por la invasión musulmana.
Los preciosos fragmentos de madera fueron llevados a la que entonces se llamaba Santa María ad Praesepem (pesebre), llamada así porque papa Sixto III mandó a construir allí una "Gruta de la Natividad" idéntica a la de Belén.
Que mejor lugar para colocar el cunabulum”, la Sagrada Cuna, que más tarde fue colocada bajo en un relicario debajo del altar mayor.
