Los ataques terroristas no cesan en Nigeria y los miembros de la Iglesia lo sufren. Recientemente se informó de dos nuevos asesinatos de sacerdotes. Por un lado, el padre Vitus Borogo, asesinado el sábado 25 de junio en Kaduna. Por otro, el padre Christopher Odia Ogedegbe, secuestrado y asesinado el domingo 26 cuando se dirigía a una misa en Auchi.
Las muertes de estos dos sacerdotes se suman a esa larga lista de ataques contra cristianos en Nigeria y en un mes donde aún permanece en la retina lo sucedido el pasado 5 de junio, fiesta de Pentecostés, cuando hombres armados abrieron fuego en la iglesia católica de San Francisco Javier de Owo.
Una oración desde Brasil por Nigeria
Es por todo esto que la Comisión Pastoral Episcopal para la Acción Misionera y la Cooperación Intereclesial de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) y la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN) promueven, para este viernes 1 de julio, la Jornada de Oración y Misión por la Paz dedicada a Nigeria.
En ese sentido, recuerda una nota publicada por la Iglesia de Brasil, Nigeria es un país que ha sufrido la violencia en varios episodios. Se señalan desde secuestros de mujeres y niñas cristianas hasta ataques a las comunidades eclesiásticas.
“Las noticias están constantemente reportando estos casos. Y no podemos acostumbrarnos a todo esto. Entonces, este 1 de julio de 2022, haciendo de la oración una misión, oremos por la paz en Nigeria. Y hagámonos eco de lo que dijo el presidente de ese país a la nación: '¡Este país jamás se rendirá al mal'!”, recuerda la Iglesia de Brasil en el mensaje.
“Acción misionera”
El gesto desde Brasil, que se podría imitar desde cualquier lugar del mundo, se repite mes a mes con la mirada puesta sobre la situación particular de algún país necesitado de oración. En junio, la oración estuvo dirigida a Burkina Faso. Ahora es el turno de Nigeria.
En tanto, se recuerda una vez más aquello de colaborar con la obra misionera a través de la oración. En efecto, lo que se busca es valorar la oración como “acción misionera” y para ello la invitación es que cualquier cristiano católico dedique un tiempo al día para poner la mirada en los otros.
Video (portugués):