Los relatos repiten casi siempre el mismo patrón: un pastor, niño o adulto, hombre o mujer, está cuidando su rebaño. De repente, uno de los animales se extravía o se empieza a comportar de forma extraña o casi milagrosa.
Al acercarse, el asombrado pastor o pastora encuentra una pequeña imagen de la Virgen María. Corre a su aldea para comunicar el hallazgo, y en seguida los habitantes deciden construir una ermita o santuario para albergar la imagen. Muchas veces, el hallazgo está rodeado de milagros y curaciones extraordinarias.
Podríamos estar hablando de la Virgen de Núria, o de la de Meritxell, o de la de Covadonga, o de la de Guadalupe, o de la de la Almudena. O de cientos de pequeñas advocaciones locales en todo el territorio español. Fueron encontradas en manantiales, en grietas de la roca, en bosques o en troncos de árboles, y de allí toman a veces sus nombres.
No se trata, por tanto de apariciones marianas de tipo sobrenatural, sino de inesperados hallazgos de imágenes en los sitios más insospechados.
Según algunos historiadores, muy probablemente estas imágenes habían sido ocultadas siglos antes por los cristianos mozárabes, para evitar su profanación por parte de los invasores musulmanes.
Algo parecido, aunque a menor escala, sucedió durante la Guerra de la Independencia contra los franceses, y durante la Guerra Civil. Muchos fieles, para salvar las imágenes a las que tenían devoción, las escondían en lugares insospechados. Años o siglos después, cuando el recuerdo de aquel escondite se había perdido, las imágenes "volvían a descubrirse" milagrosamente.
También son "encontradas" varias vírgenes en América Latina, como Aparecida (Brasil) o Nuestra Señora de los Ángeles (Costa Rica); y en este caso, siempre por los más "pobres" del lugar.
Tierra de María
Como fenómeno histórico, sin embargo, las "vírgenes encontradas" son propias de la época de la Reconquista española; es sorprendente el ingente número de "hallazgos" en todo el territorio de la Península. Para darnos una idea de la magnitud del fenómeno, sólo en las provincias de la antigua Corona de Aragón, se cuentan más de 200 vírgenes encontradas. Casi, cada pueblo tiene la suya propia.
Y para muchos cristianos de la época, suponían la "confirmación divina" de su lucha contra los infieles, y un signo de especial predilección, por el que España era conocida como "tierra de María".
En realidad, es también el testimonio de la fe mantenida a escondidas durante la dominación musulmana, a pesar de las dificultades. Las leyendas, exageradas, que rodean estas imágenes, muchas veces las consideran traídas por los mismos apóstoles, o incluso fabricadas por san Lucas. En cualquier caso, aparecen siempre conectadas con los primeros cristianos hispanos, con los que se sentían en continuidad.
La mayoría de ellas celebra su fiesta el 8 de septiembre, día en que la Iglesia católica celebra el nacimiento de la Virgen. Algunas advocaciones tienen su propio día de fiesta, que suele coincidir con el día de su hallazgo.
En esta galería puedes descubrir las más famosas: