Era una mujer que podía amar desinteresadamente. Se trata de su madre, Mary O'Neil, dijo Sean O'Sallaigh. Recibió mucho de ella en la vida: cuidado, apoyo, interés. Ella era su amada madre y la persona más importante en la vida.
Entonces, cuando descubrió que tenía Alzheimer, supo qué hacer. ¡Llevó a mamá a un viaje de ensueño de 18 meses alrededor del mundo!
Viaje contra el Alzheimer
Antes de dar este loco paso, visitaba a su madre cuatro veces por año, viajando entre Irlanda e Italia, donde residía. Cuando la salud de su madre comenzó a deteriorarse, los médicos le sugirieron que pensara en un asilo de ancianos. Pero también agregaron que las personas positivas y felices toleran mejor la enfermedad.
Para Sean, el hogar de ancianos no era una opción. Así que decidió luchar por la felicidad de Mary.
Sabía que viajar le daba alegría, ya lo habían comprobado antes. Y aunque también sabía que no detendría la enfermedad, quería que estos últimos años de la vida de Mary fueran lo más hermosos y coloridos posibles. ¡Y así fue como sucedió! Viajaron hasta su muerte...
Primero fue Nepal: Sean quería que su madre no pasara el invierno en Irlanda, donde vivía a diario. Al ver cómo le gustaba el viaje, decidió emprender un viaje mucho más largo.
Gracias a esto, Mary pudo disfrutar no solo del festival de los colores en Nepal, sino también de hacer caminatas en las montañas de Italia, ver a los niños jugar junto al lago o sentir la arena bajo sus pies en Sudáfrica.
Nunca ha sido una carga
Según confesó Sean a la agencia de noticias británica SWNS, lo que hizo por su madre en comparación por lo que Mary hizo toda su vida por él fue solo un asunto menor. Aunque tuvo que renunciar a su vida durante el viaje juntos, dice que su madre nunca fue una carga para él. Hizo todo lo posible para que ella pudiera disfrutar del viaje.
Esta aventura mejoró la condición de Mary al principio. Como dicen los médicos, sucedió por experimentar situaciones nuevas. "Caminaba más y hablaba más, e incluso aprendió nuevas palabras. Todos querían hablar con ella y le encantó", dijo Sean.
"La extraño mucho"
Sin embargo, el Alzheimer demostró ser despiadado. La enfermedad progresó, pero se las arreglaron lo mejor que pudieron. "Felizmente nos reímos juntos. Cada día fue muy gratificante. Te miraba con esos ojos y sabías que lo apreciaba todo", confesó.
Al final de su vida, Mary ya no podía caminar, se movía en una silla de ruedas. Sean, para que mamá se sintiera como en casa, ¡instaló su sofá en su auto! Sus últimos momentos juntos estuvieron llenos de una felicidad inesperada, a pesar de una enfermedad tan difícil y consciente.
En 2019, Mary enfermó de una infección pulmonar que fue la causa directa de su muerte. Murió el 24 de mayo de 2019, a la edad de 83 años. "La extraño mucho", confesó Sean, quien hizo que la vida de su madre pareciera inusual.
Fuente: SWNS, Yahoo.com