Vaticano: los grandes acontecimientos del próximo año

El gran juicio financiero del llamado asunto del "edificio de Londres", iniciado en julio de 2021, continuará a partir de enero y debería abarcar al menos todo el próximo año. Tras un lento comienzo, el tribunal vaticano empezó a escuchar a testigos este otoño, una fase que se espera que ocupe gran parte del próximo año.

El Secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, será uno de los que acudan a arrojar luz sobre este complejo caso, que parece haberse agravado aún más, ya que parece probable que se prolongue en otros juicios. El promotor de justicia, Alessandro Diddi, anunció que había abierto dos investigaciones adicionales, una sobre el círculo familiar del cardenal Angelo Becciu, antiguo sustituto del Secretario de Estado, y otra sobre un posible intento de manipulación del testigo clave, monseñor Alberto Perlasca.

La promulgación por el Papa Francisco de la nueva constitución de la Orden de Malta el pasado mes de septiembre puso fin a cinco años de reformas marcadas por numerosos contratiempos. El pontífice decidió reforzar el estatus religioso de la Orden y suprimir los requisitos de nobleza para acceder a sus más altos cargos. Para garantizar el éxito de su reforma, no dudó en nombrar él mismo al actual Lugarteniente (jefe temporal) de la Orden y sustituyó a todo el Consejo Soberano por personalidades de su elección.

Ahora viene la fase de integración de la reforma, que comenzará con el Capítulo General del 25 de enero. El Soberano Consejo tendrá la tarea de nombrar al próximo Gran Maestre de la Orden, que ha estado sin uno desde la muerte de Frey Giacomo della Torre del Tempio di Sanguinetto el 29 de abril de 2020. La elección del nuevo Gran Maestre y del equipo que le apoyará será decisiva para el futuro de la Orden y su relación con la Santa Sede.

El Papa Francisco viajará a África del 31 de enero al 5 de febrero en su 40º viaje fuera de Italia desde el inicio de su pontificado en 2013. Ha viajado a más de 50 países en total, realizando una media de cuatro viajes al año. En África, el Pontífice argentino pasará tres días en la República Democrática del Congo, en Kinshasa, donde se reunirá con víctimas de los conflictos en el este del país. Otros actos destacados de su estancia en la RDC son una misa al aire libre en el aeropuerto de Kinshasa, que podría congregar a cientos de miles de fieles.

El 3 de febrero, el Papa viajará a Sudán del Sur con el Arzobispo de Canterbury y el Moderador de la Asamblea General de la Iglesia Presbiteriana de Escocia para participar en una peregrinación ecuménica por la paz en este joven país marcado por la violencia. Este primer viaje de un Papa a Sudán del Sur tiene una dimensión diplomática muy importante, ya que la Santa Sede, junto con las otras dos Iglesias cristianas, desempeña un importante papel de mediación para lograr la paz.

El Vaticano se prepara para conmemorar los diez años de la histórica renuncia del Papa Benedicto XVI. Fue el 11 de febrero de 2013, festividad de Nuestra Señora de Lourdes. Primer papa que renunciaba voluntariamente desde Celestino V, en 1294, anunció la noticia a sus hermanos cardenales reunidos en un consistorio que debía simplemente ratificar canonizaciones. En latín, dijo: "Bien consciente de la gravedad de este acto, en plena libertad, declaro que renuncio al ministerio de Obispo de Roma, Sucesor de San Pedro, que me fue confiado por los Cardenales el 19 de abril de 2005, por lo que a partir del 28 de febrero de 2013, a las 20 horas, la Sede de Roma, la Sede de San Pedro, quedará vacante, y el cónclave para la elección del nuevo Pontífice deberá ser convocado por quienes tienen la responsabilidad de hacerlo.

Casi diez años después de su jubilación, el pontífice alemán sigue viviendo en el monasterio Mater Ecclesiae, en los jardines vaticanos. Cumplirá 96 años el 16 de abril de 2023.

El Sínodo sobre el futuro de la Iglesia lanzado por el Papa Francisco en octubre de 2021 seguirá su curso este año. Tras la fase diocesana, en la que 112 conferencias episcopales han presentado sus resúmenes a Roma, ha comenzado la fase continental, que durará hasta marzo. En Europa, por ejemplo, unos 200 participantes -más 400 personas en línea- se reunirán en Praga (República Checa) del 5 al 9 de febrero para reflexionar sobre la Iglesia del mañana.

El lugar de las mujeres y los jóvenes en la Iglesia, el sufrimiento de los sacerdotes, debates sobre la liturgia o situaciones sensibles en la vida de las Iglesias locales - divorciados vueltos a casar, poligamia, LGBT, abusos... Los participantes podrán retomar y trabajar sobre los temas planteados por la primera fase del Sínodo. En una segunda fase, del 10 al 12 de febrero, los presidentes de las conferencias episcopales se reunirán para reflexionar sobre las conclusiones de estos encuentros sin precedentes, en los que se dan cita laicos, clérigos y religiosos.

Siguiendo el mismo esquema, la fase continental asiática tendrá lugar del 24 al 26 de febrero, la africana del 1 al 6 de marzo, la de Oceanía del 5 al 9 de febrero y la de Oriente Próximo del 12 al 18 de febrero.

Todas las conferencias continentales deben enviar sus resúmenes antes del 31 de marzo. Sobre la base de estos documentos continentales, la secretaría del Sínodo en Roma elaborará el Instrumento de trabajo (Instrumentum laboris) antes de junio de 2023. Este texto será la base de las asambleas de la Iglesia universal, que tendrán lugar en Roma en dos etapas: del 4 al 29 de octubre de 2023, y después en octubre de 2024.

En noviembre, la visita ad limina de los obispos alemanes puso de manifiesto sus discrepancias con la Curia romana y su determinación de seguir promoviendo el viento reformista que impulsa su trayectoria sinodal nacional. Esta última, nacida de la crisis de los abusos, se ha convertido en un cuestionamiento radical de ciertas estructuras y principios de la Iglesia, ya sea sobre la cuestión de la homosexualidad, el celibato de los sacerdotes o la ordenación sacerdotal de las mujeres. La última asamblea de este movimiento se celebrará en marzo, en paralelo al Sínodo sobre el futuro de la Iglesia lanzado por el Papa Francisco en todo el mundo.

Por el momento, el Papa ha dejado claro que no está de acuerdo con el camino emprendido en Alemania, pero se ha abstenido de intervenir. El movimiento alemán también ha sido invitado por algunos cardenales a alinearse, sin éxito, al de Roma. Sus líderes han dejado claro que consideran que tienen más mandato de los miembros de su sínodo nacional que de la Curia romana. Por lo tanto, las decisiones de esta última asamblea sinodal serán especialmente esperadas.

El primer pontífice sudamericano de la historia, el primer jesuita en llevar el anillo del pescador, el primer obispo de Roma en elegir el nombre de Francisco... El 13 de marzo, el mundo recordará la elección del Papa Francisco y los expertos vaticanos ofrecerán ya un balance de los diez años de su pontificado.

Elegido Papa tras Benedicto XVI, aquel a quien los cardenales fueron "a buscar al fin del mundo" ha sorprendido con su nuevo estilo de pastor que quiere llevar la Iglesia a las periferias.

La reforma de la Curia, la lucha contra los abusos, contra el clericalismo, el lugar de los laicos y de las mujeres, la ecología, la liturgia, el diálogo con el islam... Tantos proyectos liderados por Francisco desde 2013.

Inicialmente previstas para el verano de 2022, las Jornadas Mundiales de la Juventud de Lisboa se han aplazado un año debido a la pandemia. Tras Río de Janeiro en 2013, Cracovia en 2016 y Panamá en 2019, el Papa Francisco asistirá a su 4ª JMJ -se inscribió oficialmente el 23 de octubre-pasado.

A sus 86 años, se prepara para regresar a Portugal, seis años después de su viaje a Fátima en mayo de 2017. En el Vaticano y en Lisboa prosiguen los preparativos para la buena organización de este acontecimiento, que ha tomado como tema la frase del Evangelio de Lucas: "María se levantó y se fue deprisa".

Es difícil calcular el número de participantes en estas primeras jornadas post-pandémicas, sobre todo teniendo en cuenta que la crisis económica ha afectado a muchas partes del mundo y que la secularización ha aumentado en Europa. Al celebrarse en el Viejo Continente, los organizadores pueden echar la vista atrás a la última JMJ europea, celebrada en Cracovia en 2016. Hubo 700.000 inscripciones y casi 2,6 millones de personas contadas en la misa final.

Lanzado en octubre de 2021, el Sínodo sobre el futuro de la Iglesia, inédito en su forma, se desarrollará en tres fases: diocesana, continental y finalmente universal. La última fase tendrá lugar en Roma. Inicialmente previsto para octubre de 2023, tras dos años de trabajo, finalmente tendrá lugar en dos fases: del 4 al 29 de octubre de 2023, y después en octubre de 2024.

El Papa Francisco ha querido así dar más "tiempo de discernimiento" a este original y laborioso proceso, anunciando su prórroga.

Se han dado pocos detalles sobre la forma que adoptará esta fase universal. Aún no se ha decidido si las propuestas de las fases diocesana y continental se someterán a votación. Normalmente, en estas asambleas sólo votan los padres sinodales (obispos o cardenales), pero este sínodo podría ser innovador. Cuando la Hermana Nathalie Becquart fue nombrada Subsecretaria del Sínodo en 2021, se sugirió que podría ser la primera mujer con derecho a voto.

Se espera que en 2023 once cardenales electores, entre ellos cinco italianos, alcancen la edad de 80 años y pierdan así su derecho a participar en un cónclave. La reducción de 125 a 114 cardenales electores -sin contar posibles casos de muerte prematura o exclusión del Colegio Cardenalicio- podría allanar el camino para que un consistorio, potencialmente en otoño de 2023, renueve el Sacro Colegio.

Dentro de la Curia Romana, algunos obispos, como el arzobispo Claudio Gugerotti, nuevo prefecto del dicasterio para las Iglesias Orientales, podrían lógicamente ser elevados a la púrpura.

Entre las Iglesias locales, figuras como el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y el arzobispo de Dakar, Benjamin Ndiaye, son posibles futuros cardenales, pero el Papa Francisco ha tomado la costumbre de frustrar los pronósticos buscando nuevos cardenales de las "periferias". El límite teórico del número de cardenales electores es de 120, pero los papas de la historia reciente han superado este umbral en varias ocasiones.