Al sur de Italia, particularmente en Sicilia, el 19 de marzo se organiza la Mesa de San José (o Tavola di San Giuseppe) que, además, sirve para celebrar el Día del Padre en familia.
La leyenda dice que esta tradición surgió en la época medieval, cuando Sicilia sufría una enorme sequía y la gente moría de hambre porque todos los sembradíos se secaron. Los sicilianos le rezaron a San José y cayó una gran lluvia así que, en agradecimiento, en la primera gran cosecha, hicieron una mesa con alimentos que se la ofrecieron al padre de Jesús y repartieron comida entre los más necesitados.
Luego, pasó a ser una tradición anual, y se agregaron otros elementos simbólicos con el pasar de los años y la manera de celebrarlo.
Qué debe tener
Usualmente, se crean tres niveles en la mesa con la ayuda de cajas o piezas de servir para simbolizar tanto a la Sagrada Familia como a la Santísima Trinidad. Se cubre con un mantel blanco y se pone una imagen de San José (puede ser una escultura o una estampita) en la mesa.
Adicionalmente, se puede decorar con flores también (preferiblemente con lirios, que representan su pureza, y por eso los vemos en sus imágenes) y algunos elementos decorativos (como velas o cintas) en verde, amarillo y/o marrón, representando el atuendo de San José.
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La comida
Como el Día de San José coincide con el tiempo de Cuaresma, idealmente no se sirven carnes, sólo pescado (aunque el precepto de la abstinencia solo obliga los Viernes de Cuaresma a no comer carne).
Se acompaña con diversos tipos de panes (puede ser con semillas de sésamo e, incluso, si los haces tú, pueden ser con distintas formas alusivas a San José, como su bastón, un corazón, herramientas de carpintería, etc), frutas, legumbres, pasta, olivas y/o dulces.
Si haces una pasta o una sopa de cebolla, por ejemplo, en lugar de queso (para quienes en Cuaresma tampoco consumen huevos ni lácteos), le puedes poner pan rallado que simula las virutas y el polvo de madera que se encuentra en una carpintería.
Algunas ideas de platos son: pasta con salsa de tomate casera y sardinas (plato típico siciliano), sopa de lentejas, habas guisadas (se cree que lo que los salvó de la hambruna fueron las habas), alcachofas rellenas y pescado al horno con brócoli y papas.
Sin embargo, actualmente, todo dependerá también de cuándo hagas tu mesa y tus posibilidades. Perfectamente puede ser sólo café y dulces si es una merienda. También puedes consumir vino. Entre los dulces, como es una tradición de origen italiano, se recomiendan rosquillas, hojaldres de crema y biscotti.
Asimismo, según la tradición, la mesa debe ser mínimo para tres personas (el número viene dado por la Sagrada Familia: San José, la Virgen María y Jesús) y máximo trece (para no superar a los comensales que se sentaron en la Última Cena); pero hoy en día es bienvenido que incluso una persona que viva sola (y por alguna razón no pueda invitar a alguien) la haga en honor al santo.
En familia o en comunidad
La Mesa de San José la puedes hacer en casa o puedes organizarte con los miembros de tu parroquia para hacerlo para la comunidad. Aunque muchos ahora la hacen sólo para sus miembros de la familia (especialmente para honrar a padres, abuelos, tíos, padrinos, etc.), trata siempre de donar algunos de los alimentos a alguien menos afortunado… Puede ser a una persona sin hogar que pasa por la calle donde vives, algún personal de limpieza o hasta un vecino que se ha quedado sin empleo.
Aunque su origen es de este país europeo, con la migración de muchos italianos, ya es una costumbre que se ha adoptado en varios países. Sin duda, es una manera muy bonita de honrar a San José y celebrar a la familia y a los hombres que trabajan por ella.
Si haces tu Tavola di San Giuseppe y tienes redes sociales, nos encantaría verla en @aleteia_es ¡Feliz día de San José y del Padre!
