Un sacerdote de la iglesia católica de santo Tomás en Thomaston, Connecticut, asegura haber presenciado un milagro eucarístico en su parroquia el 5 de marzo de 2023.
Según WFSB News, "[el Padre Joseph] Crowley dijo a principios de este mes, que mientras un ministro de la Eucaristía estaba repartiendo la Comunión... sucedió un milagro. El número de hostias que tenía el ministro había aumentado en lugar de disminuir".
El tema es que la parroquia se estaba quedando sin hostias consagradas y les preocupaba que se acabaran antes de que terminara la distribución de la Comunión.
Sin embargo, sus copones se volvieron a llenar milagrosamente, y al final de la Misa, tenían las mismas o incluso más hostias consagradas que cuando comenzaron. Padre Joseph Crawley dijo en un video:
"Es realmente genial cuando Dios hace estas cosas, y es realmente genial cuando nos damos cuenta de lo que ha hecho, y acaba de suceder hoy.
Muy poderoso, muy impresionante, muy real, muy impactante . Pero pasa, y hoy pasó".
El obispo local es el principal responsable de investigar un presunto milagro, que será examinado por varios expertos. Después, la arquidiócesis de Hartford se pronunciará oficialmente, aunque de momento ha declarado:
"Los católicos romanos experimentan un milagro diario porque cada vez que se celebra la Misa, lo que era pan se convierte en el Cuerpo de Cristo y lo que era vino se convierte en su Sangre.
A través de los siglos, este milagro diario ha sido a veces confirmado por señales extraordinarias del Cielo, pero la Iglesia siempre tiene cuidado de investigar las informaciones de tales señales con cautela, para que no se dé crédito a algo que resulte ser infundado".
Incluso si este milagro no es reconocido oficialmente por la Iglesia, la fe de la parroquia local ha sido renovada por esta experiencia y el P. Crawley dice que está agradecido por la oportunidad de presenciar tal evento.
Vínculo con el beato McGivney
Curiosamente, la parroquia de donde se informó el milagro es la misma iglesia donde una vez sirvió el beato Padre Michael McGivney.
Este sacerdote es el fundador de Caballeros de Colón y fue beatificado en 2020. A su intercesión se le atribuyó un milagro: la curación de un niño por nacer de una condición que amenazaba su vida.
