«Esta es la fiesta de la familia, de la vida, de la abundancia. No hay baile en grande, como en otras festividades; acá las familias se sientan en círculos con las ofrendas y se ponen en oración».
Así se expresó hace algunos años quien fuera párroco de Santa Vera Cruz en Cochabamba, el sacerdote jesuita Valerio Pacheco en una nota reproducida por El País de Bolivia y en el que daba cuenta de una famosa festividad en Bolivia.
En efecto, Santa Vera Cruz Tatala es considerada la segunda fiesta religiosa más importantes de Cochabamba (detrás de la fiesta de la Virgen de Urkupiña) y suele recibir cada año a unos 40.000 turistas (la mayoría de Bolivia).
Sin embargo, esta celebración guarda la particularidad de también ser considerada la fiesta de la fecundidad y la abundancia. «Es la fiesta de la fecundidad humana, de la Madre Tierra, el ganado y la abundancia», reforzaba en el aquel entonces Pacheco.
Es que las raíces de esta fiesta religiosa tienen que ver con los pueblos originarios locales y antes que fuera Santa Vera Cruz tenía vínculo con la constelación de la Cruz del Sur (Chakana), pues en ese entonces, ante de ser retomada por el cristianismo, se la celebraba.
Debido a esto, tal cual confirmó también a Los Tiempos la etnopsicóloga Esther Balboa, este sitio (destacado por una piedra con la figura de una cruz) era primero un lugar astronómico que posteriormente se convirtió en sagrado.
«Señor extraño» y coplas
Según recordaba también Los Tiempos, luego de la llegada de los españoles se sustituyó esto por la cruz cristiana y fue llamada Santa Vera Cruz (cruz verdadera). Por lo cual, aquello de la Chakana fue cambiada por la cruz de Cristo, también llamado Tatala (abuelo, abuelito o señor extraño).
Es por todo esto que esta festividad asociada a la fecundidad, que suele realizarse en los primeros días de mayo, también se caracteriza por la concurrencia de personas que asisten para pedir hijos o también la reproducción del ganado (incluso buena cosecha u agradecimiento de favores recibidos.
En ese sentido, un gesto común, por otro lado (pero también en referencia a la fecundidad), es que parejas dejen muñecos en la cruz como símbolo de no querer tener más hijos y dar así esperanza a quienes sí los quieren.
Por último, las coplas. Otra de las grandes distinciones de esta festividad donde las necesidades también se pedir cantando.
«Caminemos Juntos»
Desde la parroquia Santa Vera Cruz en Cochabamba se invitó a la celebración de esta festividad 2023 del «Tatala» a través del lema –con bases en el camino sinodal iniciado en la Iglesia- «Caminemos Juntos con el Señor de Santa Vera Cruz».
En tanto, según se informó, además de celebraciones religiosas entre el 28 de abril y 4 de mayo, se tiene también prevista la peregrinación de la réplica de la imagen del Señor de Santa Vera Cruz desde Valle Hermoso hasta el santuario, tal cual confirmó a través de un video difundido por la Arquidiócesis de Cochabamba el párroco de Santa Vera Cruz, Oscar Gutiérrez.