"Volveré rejuvenecido", dijo el Papa Francisco al hablar con los periodistas en su vuelo de Roma a Lisboa para la Jornada Mundial de la Juventud del 2 de agosto de 2023. El avión aterrizó a las 10.43 en la capital portuguesa, donde el Papa permanecerá hasta el 6 de agosto.
Durante las tres horas de vuelo, como es habitual, el Pontífice, de 86 años, visiblemente cansado pero sonriente, recorrió el pasillo saludando uno a uno a los 78 periodistas a bordo del A320 fletado por ITA Airways.
"Muchas gracias por vuestra compañía y vuestro trabajo", dijo el jefe de la Iglesia católica al micrófono, antes de comenzar los saludos, estrechar manos, charlar con todos y detenerse a recibir algunos regalos de las filas. "Volveré rejuvenecido", aseguró a uno de los periodistas. De hecho, los encuentros con las nuevas generaciones suelen ser para el Papa latinoamericano una oportunidad de rejuvenecer, ya que le gusta estar en contacto con ellos.
"¡Seguiremos haciendo lío!"
A un periodista que señaló que ésta era la cuarta JMJ del Pontífice, diez años después de la primera JMJ en Río de Janeiro (Brasil), el Papa le dijo en español: "¡Seguiremos haciendo lío! Se refería así a su frecuente llamamiento a los jóvenes para que "hagan ruido".
El Papa también mencionó durante los debates que los organizadores habían previsto "más de un millón de jóvenes" en el evento. Están previstos varios encuentros con jóvenes de todo el mundo: la bienvenida oficial, el 3 de agosto; el Vía Crucis, el 4 de agosto; la vigilia de oración, el 5 de agosto; y la misa de clausura, el 6 de agosto.
En el aeropuerto, el Papa Francisco fue recibido por el Presidente portugués Rebelo De Sousa, con quien se entrevistó en el palacio presidencial, donde pronunció un discurso ante las autoridades del país, el primero de su viaje de cinco días.