separateurCreated with Sketch.

¿Cómo se prueba nuestra confianza en Dios cuando oramos?

Mężczyzna modlący się na różańcu
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Philip Kosloski - publicado el 21/04/24
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Siempre que oramos, especialmente cuando lo hacemos por alguien o por algo en particular, necesitamos confiar en Dios con todo nuestro corazón, mente y fuerzas

La confianza desempeña un papel importante en nuestra vida espiritual, especialmente cuando rezamos a Dios.

La oración de intercesión, en particular, es una de las principales formas en que se pone a prueba nuestra confianza en Dios.

El Catecismo de la Iglesia Católica introduce este tema en su sección sobre la oración:

La confianza filial se prueba en la tribulación. La principal dificultad se refiere a la oración de petición, por uno mismo o por los demás, en intercesión.

Siempre que recemos por algo o por alguien, debemos preguntarnos: "¿Creo que Dios responderá a mi oración?"

Una pregunta similar que debemos hacernos es: "¿Confío en la fidelidad de Dios?"

Si somos sinceros con nosotros mismos, la mayoría de las veces rezamos y no creemos realmente que Dios vaya a responder a nuestra oración.

Esta disposición a menudo se ve afectada por nuestras experiencias pasadas, especialmente cuando oramos por la curación de alguien y no se cura.

Podemos pensar para nosotros mismos que Dios no respondió a nuestra oración porque no sanó a esa persona, o que no nos escuchó cuando oramos.

Ante el aparente "silencio", podemos sentirnos tentados a dejar de orar, pues pensamos que Dios no nos escuchó.

¿Escucha Dios nuestras plegarias?

Misunderstood man praying

El Catecismo expresa de manera similar esta dificultad que muchos de nosotros experimentamos:

Algunos incluso dejan de rezar porque piensan que su petición no es escuchada. Aquí habría que plantearse dos preguntas: ¿Por qué pensamos que nuestra petición no ha sido escuchada? ¿Cómo es escuchada nuestra oración, cómo es "eficaz"?

El punto clave a tener en cuenta es que Dios siempre escucha nuestras oraciones. Si realmente creemos que Dios existe y que está presente en cada momento de nuestras vidas, no hay forma posible de que sea "sordo" a nuestras oraciones.

Dios escucha las oraciones de todas las personas, sean quienes sean o hablen el idioma que hablen

Para muchos de nosotros, la decepción viende cuando Dios responde a nuestras oraciones de una manera que no nos gusta. Puede que Dios no cure a alguien por una razón concreta, aunque es probable que no sepamos esa razón antes de morir.

Lo que tenemos que hacer es confiar en que, al final, los caminos de Dios siempre son mejores para nosotros.

Dios nos conoce mejor que nosotros mismos. Solo tenemos que confiar en Él.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.

banner image
Top 10
See More
Newsletter
¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.