La exposición de iconos de la Divina Misericordia es producto de un seminario de arte contemporáneo que surgió al comenzar la guerra en Ucrania. Todas las obras son nacidas de la sensibilidad, la contemplación del misterio de la Divina Misericordia y de un encuentro único entre los artistas.
Con sus obras, artistas representantes del cristianismo oriental y occidental evocan la misericordia para un mundo atormentado por las guerras. Al hacerlo, demuestran que la unidad y la armonía son posibles, y que las diferencias que existen entre nosotros pueden inspirar, mejorar y hacer surgir y expresar aún mejor: la verdad, la bondad y la belleza.
Arte y oración
Los artistas también hicieron una peregrinación al santuario de Łagiewniki, uniéndose en oración con la coronilla de la Divina Misericordia y cantando, después, la Akathist oriental en honor de la Madre de Dios.
Además, el seminario de arte y la exposición también fueron una oportunidad para rezar por la paz en Ucrania. Uno de los frailes dominicos dirigió un momento de oración con los salmos en la capilla académica, decorada con iconos de Jerzy Nowosielski.
Los iconos de la Divina Misericordia pudieron verse en primavera en los claustros del monasterio dominico de Cracovia. En esa ocasión, Aleteia Polonia tuvo la oportunidad de hablar con varios artistas, procedentes de Polonia y Ucrania.
Iconos de la Divina Misericordia, Eleos, Rachamin
Mateusz Środoń, coordinador de la exposición, artista plástico y pintor de iconos, explica a Aletea cómo nació el taller polaco-ucraniano al aire libre:
"Al comienzo de la guerra total en Ucrania, una amiga nuestra, la esposa del conocido pintor de iconos Dmytr Horditsa, que también crea iconos ella misma, vino a Varsovia. En las semanas siguientes, se pusieron en contacto conmigo otras personas que querían ayudar a los artistas refugiados a abrirse camino profesionalmente en Polonia. En conversaciones con Dmytr Horditsa y el pintor de iconos polaco Michał Płoski, surgió la idea de organizar un taller de pintura al aire libre que reuniera a artistas de Oriente y Occidente. El primero tuvo lugar el primer año de la guerra y se tituló Rostros de luz".
Ayuda de lo alto
Su obra, titulada Alzo mis ojos a los montes, hace referencia al Salmo 121, un fragmento de la oración de los peregrinos que acudían al templo de Jerusalén:
Levanto mis ojos a las montañas: ¿de dónde me vendrá la ayuda? La ayuda me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra".
"Estas palabras me vienen a la mente cuando miro el icono del Señor Jesús contra la montaña", explica el artista. "El Señor Jesús corre al encuentro del hombre. Este hecho de 'correr', de salir al encuentro del hombre, fue el tema de nuestros debates y el motivo de nuestra búsqueda artística".
Arte para ayudar a víctimas de la guerra
Los iconos de la Divina Misericordia expuestos fueron donados por los artistas para una subasta benéfica y los fondos recaudados se destinarán a la organización de viajes de descanso para los hijos de los soldados ucranianos heridos o muertos en defensa de su patria.
Declaraciones de los artistas basadas en el catálogo de la exposición "Mercy, Eleos, Rachamim".