Hay un poema bellísimo de Calderón de la Barca que dice todo lo que yo anhelo.
¿Qué quiero mi Jesús? Quiero quererte,
quiero cuanto hay en mí del todo darte,
sin tener más placer que el agradarte,
sin tener más temor que el ofenderte.
Quiero olvidarlo todo y conocerte,
quiero dejarlo todo por buscarte,
quiero perderlo todo por hallarte,
quiero ignorarlo todo por saberte.
Quiero, amable Jesús, abismarme
en ese dulce hueco de tu herida,
y en sus divinas llamas abrasarme.
Quiero por fin, en Ti transfigurarme,
morir a mí, para vivir Tu vida,
perderme en Ti, Jesús, y no encontrarme.
* * *
He perdido el miedo a decirle a Jesús que le quiero.
Es lo que suelo decirle cuando lo visito en algún sagrario.
“Te quiero Jesús. Lo eres todo para mí”.
Nunca me canso de decírselo. Sé que a Él le encanta saber que le queremos mucho. Anímate, visita a Jesús en el sagrario y dile que le quieres.
El camino que hoy transitas en tu búsqueda de Jesús fue recorrido anteriormente por cientos, miles de enamorados que buscaban a Jesús.
Busca sus pasos y coloca los tuyos sobre los suyos, así llegarás a buen puerto.
¿Cómo encontrarlos? Hay muchas formas. La que a mí me ayuda mucho es leer la santa Biblia y las biografías de los santos.
Son ellos, los amigos de Dios, quienes pueden explicarte cómo una persona de mal carácter, o uno al que le gustaban las fiestas, o aquél que era mal hablado, o éste que fue un gran pecador, y ni digamos… san Pablo que persiguió a los cristianos, lograron altos grados de santidad.
En algún momento fueron tocados por Dios y amaron. Dedicaron lo que les restaba de vida para amar, a todos, sin excepción. Y este amor los urgió a llevar la buena nueva por el mundo y vivir el Evangelio en toda su radicalidad.
¿Cómo lograrlo? Es muy sencillo.
¿Quieres ser de Jesús?
Ama.
¿Quieres hacer lo que Jesús te manda?
Ama un poco más.
Él sabe que si lo hacemos, seremos felices.
“Si cumplen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, como yo he cumplido los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.” (Juan 15,10).
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Te comparto esta canción adaptada al poema “Qué quiero mi Jesús”.
