Comprar menos, lavar menos y hasta planchar menos. Son las tres claves para cuidar más y mejor nuestro armario y nuestro planeta.Los ecologistas nos vienen advirtiendo desde hace décadas. Hay que usar el agua con más cabeza. El agua, el detergente, la secadora… y hasta la plancha. Y no se trata de darle la espalda a la tecnología sino todo lo contrario: aprovechar sus avances para darle una mejor vida a nuestra ropa y con ello a los recursos naturales de nuestro planeta.
Olvídate de lavar a mano, gastarás más agua de la que usa tu lavadora en el programa delicado. ¿Pero tienes que lavar todo tras una puesta? Fíjate en el tejidos que compras y sabrás cómo mimarlos mejor.
Escucha los consejos de los expertos.
- Lava menos, airea más. Al contrario de lo que se pueda pensar, éste es un consejo que nos están empezando a repetir los fabricantes de lavadoras. No es fomentar el reciclaje porque sí, es lavar con cabeza. Lo que esta sucio a la lavadora, of course, pero olvídate de esa costumbre del siglo XX de media puesta y a la lavadora. Contaminas y malgastas agua, energía y detergente. Y tu tiempo, claro. Airear, ventilar. Se ha hecho durante siglos, pero se nos estaba olvidando. Las lavadoras actuales ya traen programas inteligentes, siempre mejor en frío. Y aprovecha los programas de lana, seda y delicados.
- Conoce lo básico de cada tejido. Aprenderás a cuidarlo y a comprar mejor. Sabrás medir el valor de una prenda. Ni el algodón es todopoderoso y resiste infinito -destrozas sus fibras con cada baño largo con lejía-, ni la seda es la hermana débil de los tejidos nobles -es mucho más valiente y duradera de lo que crees. Preocúpate por conocer la composición de tus adquisiciones, comprarás y valorarás mejor tus prendas. Firmas de todo el planeta se han subido a la tendencia de explicarnos de dónde vienen sus productos: Reformation comenzó convirtiendo telas ya usadas en nuevas prendas, los cotizados Re/Done son Levi’s vintage rescatados para una nueva vida… Ecoalf en España fabrica plumíferos con plásticos y materiales de redes reciclados. Es la respuesta a la fast fashion del usar y tirar.
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Lee sobre el tema. Hoy hay mucho más donde elegir y se puede comprar ropa de cualquier punto del planeta desde casa. Muchas voces claman por convertir este progreso en una ventaja y evitar que, al contrario, sea un enemigo de nuestro medio ambiente. La ONG Redress ha editado Dress [with] sense, un libro en el encontrarás tips para mimar tu armario pero también para conocerlo mejor. Por ejemplo, sus autores nos cuentan que para producir unos jeans se necesitan más de 3.500 litros de agua. Y por lo de usar y tirar, ¿sabes que el poliéster tarda en descomponerse unos 200 años?
- Plancha lo justo. Si tiendes mejor, ahorrarás trabajo y darás una mejor vida a tus prendas. No es seguir a pies juntillas el mantra de la ‘arruga es bella’ (y slogan de Adolfo Domínguez en los 80), pero tendiendo, perchando y doblando bien tienes mucho ganado. Volvemos al tema del orden en casa, en este caso dentro del armario. Tu tiempo es oro: guardar bien nos ahorra un rato de plancha.
- No arrincones tu secadora. Si la tienes no la infravalores. Es una gran aliada. En algunos casos mejor que tender al solazo, que se carga los tejidos si incide directamente y a temperaturas muy altas.
- Ficha un buen sastre para retoques o aprende a hacerlos tú. El largo del pantalón, un refuerzo…. Los detalles son básicos. Y si has comprado bien, buen tejido, buen patrón, buen corte, y no estás en la rueda del usar y tirar, tendrás tesoros para muchos años. Así se configuraban los armarios hace más de un siglo, con reposo y prendas muy duraderas. Y es que, probablemente, el concepto del armario cápsula es más vintage de lo que creemos.