A lo largo de los siglos, millones de personas han caminado por el lugar de la Crucifixión y Resurrección de JesúsHan pasado casi tres años desde la restauración del Edículo, la capilla construida sobre la tumba de Jesús dentro de la iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén. Ahora, la Custodia de Tierra Santa está desarrollando la restauración del suelo de la iglesia.
A lo largo de los siglos, millones de personas de todo el mundo han caminado sobre estas piedras y, ahora, los arquitectos acaban de empezar a “mapear” las piedras para determinar su nivel de deterioro.
“Estoy dibujando las piedras, piedra por piedra, que luego se transportarán desde este iPad al ordenador. A partir de ahí, obtendremos un dibujo técnico que se empleará, junto con la información reunida por los restauradores, los geólogos y los miembros de nuestro equipo”, afirmó Andrea Caligaris, de Caligaris Architects, en un vídeo producido por la Custodia de Tierra Santa, la organización franciscana encargada de la supervisión de los lugares santos en Oriente Medio. “Podremos entender el estado de conservación, el mapeo del deterioro, las superficies, para poder formular la hipótesis de un proyecto de restauración”.
Los líderes de las comunidades cristianas que administran el Santo Sepulcro anunciaron el 27 de mayo de 2019 la firma de un acuerdo para la restauración y rehabilitación de los cimientos de la tumba y el suelo de toda la iglesia.
El proyecto lo están ejecutando la Fundación Centro para la Conservación y Restauración de Patrimonio Cultural La Venaria Reale, con sede en Turín, Italia, y el Departamento de Ciencias de la Antigüedad de la Universidad La Sapienza, en Roma.
Los equipos están evaluando la “degradación que ha sufrido cada piedra y cada losa de este suelo”, explicó Osama Hamdan, un arquitecto de la Universidad Al Quds en Jerusalén. “Pero, al mismo tiempo, también estamos estudiando el tipo de material, el origen, del que deriva el material de que está hecho el suelo de la Basílica”.
Caligaris compartió la emoción que siente al abordar este trabajo, “porque estamos en este lugar, el fulcro de la cristiandad”.
“Es muy hermoso e interesante porque hay muchísimas capas en este suelo que se han ido añadiendo con el paso de los siglos, como resultado de las diversas intervenciones y ocupaciones que tuvieron lugar”, explicó Caligaris. “De modo que también es muy interesante descubrir y ver las distintas diferencias y cómo todos estos elementos se han entrelazado; un fantástico testimonio y, sin duda, un gran placer”.