Una manifestación mundial con mirada hacia el cambio climático Cuando estés leyendo estas líneas puede que ya haya pasado. Si a eso de las 11 am escuchaste un repique de campanas y no sabías por qué ahora tal vez lo comprenderás.
Es que este 11 de marzo estaba previsto un llamado, proveniente de una red integrada por decenas de organizaciones religiosas y espirituales, para hacer ruido con respecto a la alarma que despierta el cambio climático.
En el caso de Chile, Cáritas ha decidido apoyar el llamado a través de la Alianza Interreligiosa y Espiritual por el Clima en Chile (AIEC). El acto central de esta organización estaba previsto que se hiciera en la Iglesia Franciscana de Santiago de Chile.
Un repique mundial
Pero el llamado rompe frontera y es mundial. Detrás, se encuentra la Red GreenFaith Internacional (puedes conocer más de que se trata aquí).
“Nos sumamos a este llamado mundial para reducir las emisiones netas, a cero para 2030. Por el fin de las finanzas y los subsidios para el carbón, el petróleo y el gas. En Chile, significa tomar en serio la inversión en energía renovable, terminar las Zonas de Sacrificio, y poner límites a un modelo extractivista que está haciendo tanto daño a tantas comunidades. Significa firmar el Acuerdo de Escazú y respetar a los derechos de defensores del medio ambiente y los pueblos originarios. Poner fin a la deforestación y convertir el agua a un derecho para las personas y los ecosistemas,” explica Arianne van Andel, coordinadora de la AIEC, reproduce la Iglesia de Chile.
De esta manera, este 11 de marzo, personas de diversas espirituales estarán haciendo un llamado de atención sobre un tema de gran actualidad y que suele estar en el corazón del papa Francisco. Así lo ha demostrado desde la elección de su nombre el 13 de marzo de 2013, hasta su mensaje en la encíclica “Laudato Sí” sobre el cuidado de la creación.
El cambio climático amenaza al patrimonio de la humanidad:
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