El primer domingo de Adviento se inicia el año litúrgico, después de la celebración de la solemnidad de Cristo Rey, último domingo del Tiempo ordinario.
A partir de este momento, el color de los ornamentos de la Misa cambia, pasa del verde, propio del tiempo ordinario, al morado, característico del Adviento. Y la vestimenta del sacerdote -casulla y estola- es uno de los elementos en los que el cambio del color litúrgico se hace más notorio.
¿Existe una casulla azul?
¡Pero en estos días aún vamos a ver más cambios de color! Resulta que el 8 de diciembre, Solemnidad de la Inmaculada Concepción, el sacerdote puede vestir la casulla de color azul, que puede usar en lugar del blanco este día y también el 15 de agosto, ambas festividades de la Virgen.
El privilegio de usar ornamentos de color azul en estas solemnidades fue otorgado por la Santa Sede en 1864 a todas las iglesias de España y a los territorios que entonces estaban gobernados por los españoles.
Domingo "Gaudete"
Y el tercer domingo de Adviento, llamado de “Gaudete”, el sacerdote puede vestir la casulla de color rosa, para subrayar la alegría y el gozo por la cercanía del nacimiento del Señor. Este año será el domingo 12 de diciembre.
Esta casulla es usada también el cuarto domingo de Cuaresma, o domingo “Laetare”, para indicar una pausa en el rigor de la penitencia propia de este tiempo. El color rosa nos recuerda que la penitencia es necesaria para preparar las fiestas que se van a celebrar, Navidad o Pascua. Por esta razón el rosa es una mezcla entre el morado y el blanco.
Blanca Navidad
De tal manera que después de Adviento, llega el Tiempo de Navidad. Es entonces cuando los ornamentos, casulla incluida, se tornan blancos. Ese detalle indica que vamos a vivir una gran fiesta en la Iglesia.
Sin duda, este es el mejor momento del año para vivir y sentir los distintos cambios en el color de la Liturgia. Por eso es una buena oportunidad para elaborar una manualidad con el objetivo de explicarlo a los más pequeños.
Catequesis de los colores litúrgicos
Los colores en la liturgia son una manera de conectarnos visualmente con el tipo de evento o celebración de la Iglesia. Pero la elección de cada uno no es casual ni se basa en un criterio estético, sino que cada color tiene un significado profundo.
Por esta razón, explicar por qué los sacerdotes usan casullas de distintos colores es una fantástica catequesis, que puede servir para niños y adultos. No deja de ser una forma de lenguaje para la religión.
De alguna manera el color y todo lo que emana de él, acompañan al misterio que se va a producir durante la Misa o cualquier otra celebración litúrgica. Entra por los ojos y llega al fondo de nuestra alma.
Evolución de los colores
Actualmente los colores litúrgicos son el verde, morado, rojo, blanco, azul y rosa. Antes de la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II también se usaba el color negro durante los funerales y en la misa del 2 de noviembre, Solemnidad de Todos los fieles difuntos.
En algunas ocasiones especiales, y con el fin de dar mayor solemnidad, el sacerdote también puede usar telas con detalles dorados y plateados.
¿Qué simboliza cada color?
Ya hemos dicho que cada color tiene un significado que nos ayuda a entender mejor la liturgia de la Misa y cada tiempo tiene su uso particular.
Con el fin de que los niños aprendan a distinguir los colores de la Misa, desde Aleteia os hemos preparado una manualidad muy sencilla para que elaboréis con ellos 6 casullas. ¡Para ellos será una sesión más de catequesis!
Materiales necesarios para realizar la manualidad
En primer lugar, para elaborar esta manualidad necesitaremos:
6 pasos a seguir
1-Primero disponer de 9 palitos de madera, y 3 de ellos lo partimos por la mitad.
2-A continuación, pegar el trozo más corto al palito largo, formando una cruz (latina), como si fuera un maniquí. Repetiremos esta acción 6 veces, para tener los soportes para las 6 casullas de colores.
3- Entonces, sobre el cartón o porexpan, que nos servirá de base, pegar o clavar los 6 soportes de madera. Para que quede más arreglado, forrar la base con papel o pintarlo con pintura acrílica del color que prefiramos. Os recomendamos el blanco.
4- Después podemos descargarnos la imagen en blanco de las casullas (a continuación, en la galería fotográfica que hay unas líneas más abajo dispones de la plantilla) e imprimir 6 copias. Luego pintar cada una de un color litúrgico, tal como indica en la imagen. En este caso podemos usar el tipo de material que prefiramos: lápices de colores, ceras o rotuladores.
O si preferimos, podemos descargar la imagen de cada casulla en color (blanco, verde, rojo, morado, azul y rosa) y así no hace falta que las coloreemos. Solo tendremos que imprimirlas y recortarlas.
Otra opción es realizar las casullas con tela de fieltro de colores y recortarlas con la forma adecuada siguiendo la plantilla del modelo. Después adornarla con algún motivo dorado o plateado.
5- Seguidamente, con unas tijeras las cortamos con su forma, poniendo especial cuidado en recortar un agujero en el centro para poder colgarlo en el soporte de madera.
6- Por último, colocar cada casulla sobre su soporte. Y en la base escribir a qué Tiempo litúrgico corresponde cada color.
¡Ya están listas nuestras casullas! Sin duda, con esta sencilla manualidad, ahora ya sabremos cada domingo cuando acudamos a Misa, de qué color irá vestido el sacerdote y de qué color serán algunos ornamentos, como el paño que cubre el ambón, el velo del cáliz, la bolsa de corporales o el conopeo, el velo que cubre el sagrario.