Trabajador incansable. Abel Beldad se ganaba la vida en la hostelería. Regentaba un bar en Ciudad Real. Hace 8 años empezó a tener problemas de visión. Trabajador incansable aguantó en su negocio hasta que no pudo más, cuando omenzó a sufrir una ceguera severa. Pasó de ocupar todas las horas del día en su negocio, a sentir que tenía todo el tiempo libre del mundo. Algo que no podía soportar.
La perrita que le cambió la vida
Los primeros meses fueron duros. Abel se apoyó en su mujer y sus hijas hasta que decidió acudir a buscar ayuda a la ONCE. En uno de esos centros le enseñaron a moverse y valerse por sí mismo con un bastón. Pero, sin duda, su vida cambió con la llegada de Desi, una perra labrador que le ha devuelto la actividad. Abel cuenta a los medios que sin ella no podría hacer nada. Le guía por la calle, en casa e incluso le lleva al bar a tomar un cafetillo como él dice.
Objetivo, sacarse la carrera de Historia
Abel cuenta que siempre le ha gustado la Historia, pero que nunca había podido dedicarle tiempo porque tenía que trabajar en el bar. Sin embargo, ahora había llegado su momento. Abel sólo tenía el graduado escolar en un centro de educación para adultos y no sabía leer Braille pero, a pesar de ello, se preparó las pruebas de acceso a la Universidad para mayores de 45 y aprobó.
Desi, su guía en la universidad
Abel comenzó a acudir a sus clases en la universidad. Al principio le acompañaba su mujer y le llevaba a cada una de las aulas, pero pronto ese papel lo asumió del todo Desi. Su perra guía le llevaba cada día hasta su pupitre. Esta perra labrador se ha hecho famosa en toda la Facultad de Letras de Ciudad Real y no hay alumno, profesor o trabajador del centro que no la conozca.
Una más en la orla
Cuatro años después y superados los cursos, llega el momento de la orla de fin de carrera. Alumnos y profesores posan como muestra de su esfuerzo y de su éxito educativo. Y, aclamada por todos de forma unánime, en esa foto no podía faltar Desi.
La perrita posa también con su banda azul celeste ente los retratos del resto de estudiantes y su dueño. Desi ha venido a todas las clases conmigo y se ha portado fenomenal siempre, explica Abel. Todo este tiempo ha sido sin duda una alumna más. Se ha convertido en la primera perrita en aparecer en la orla de graduación de este 2022.
Con tesón todo se puede
Aunque le queda alguna asignatura y el trabajo de fin de grado para obtener su título, Abel sigue estudiando encantado de haber aparecido junto a Desi en su orla junto a los otros 24 graduados. Solo tiene palabras de agradecimiento para su gran compañera en este camino y al Servicio de Apoyo a Estudiante con Discapacidad (SAED) de la Universidad de Castilla- La Mancha que le han brindado todo tipo de facilidades. Ahora quiere completarlo con el máster y el doctorado. Abel, que se siente plenamente feliz, pide a cualquier persona con discapacidad que no se atrinchere, que salga a la calle y que luche, que con tesón todo se puede. Anima a que nadie descarte su sueño universitario.