Gran dolor causó en la comunidad católica de Colombia la profanación de uno de sus templos. En la parroquia de Santa Ana de la ciudad de Tunja robaron las hostias consagradas que se guardaban en copones dentro del sagrario. También las ofrendas que se depositaban en la alcancía y un cáliz.
Este hecho, ocurrido en la madrugada del 27 de abril, generó indignación y rechazo por parte de los habitantes del barrio Gaitán. Lo mismo en cientos de colombianos que se unieron a la Eucaristía de reparación celebrada. Sucedió este jueves 28 a las cuatro de la tarde en el mismo templo.
“Este es un acto muy delicado sobre todo cuando se profana las hostias consagradas, puede darse expulsión de la iglesia y solo el regreso lo puede permitir el Papa”, dijo el arzobispo de Tunja, monseñor Gabriel Ángel Villa Vahos. Lo dijo al denunciar y lamentar el hecho ante medios locales.
Ruptura en el techo
“Fui informado por el párroco de Santa Ana que habían saqueado el Sagrario con algunos objetos religiosos como la alcancía de la parroquia. Al parecer hicieron una ruptura por encima del techo y los que lo hicieron descendieron. Parece que pudieron haberse afectado, porque había algunas manchas de sangre en la bajada de techo”, agregó el obispo.
Los vecinos escucharon ruidos durante la noche. Sin embargo, no supieron que lo causaban ladrones dentro de la iglesia hasta que al día siguiente en la mañana el párroco lo informó. La indignación aumentó al saber que no habían respetado el Santísimo durante el hurto.
Abstenerse de hacer negocios
En el comunicado a la opinión pública la Arquidiócesis de Tunja pidió a los fieles “abstenerse de aceptar negocios con los objetos sagrados que fueron robados".
Y prosiguió: "Exhortamos a los sacerdotes y responsables de templos, capillas y oratorios, fortalecer la seguridad de dichos lugares, para evitar ser víctimas de personas inescrupulosas”.
Por su parte, las autoridades de Policía iniciaron la investigación una vez tuvieron conocimiento del hecho. El coronel Héctor Manuel Sacristán, comandante operativo de la Policía de Tunja, dijo a los medios de comunicación que rápidamente “se activó el cuerpo élite de seguridad, se adelantó la inspección al lugar de los hechos […] se adelantaron labores de vecindario entrevistando algunos residentes y verificando las cámaras de seguridad ubicadas en la zona”.
En los próximos días se llevarán a cabo oraciones y misas. Esto para reiterar el pedido de perdón a Dios por quienes cometieron este sacrilegio al robar elementos sagrados.