«Nos desesperamos, vimos que se llevaban la casa del vecino de enfrente. Simplemente tomamos a los gemelos y salimos de la casa por la parte de atrás, saltando el muro para poder salvarnos».
Este relato, reproducido por BBC Brasil, pertenece a Nicole Mandinga, una residente del barrio de Topolândia, en São Sebastião (San Pablo, Brasil). Según expresó, en medio de las lluvias torrenciales de los últimos días en esa zona del país, lo único que pudo hacer fue recoger a sus dos mellizos recién nacidos.
«Nos fuimos con la ropa puesta. Lo perdimos todo, incluido todo el ajuar que habíamos ganado para los bebés», agregó.
«Las peores de la historia»
Un fuerte temporal ha estado afectando al sur de Brasil en los últimos días. Según los últimos reportes, al menos 44 personas habían fallecidos (la cifra iba en aumento y por estas horas algunos medios locales hasta daban cuenta de casi 50 personas). Además, se estimaba que también había decenas de desaparecidos y más de 2500 personas desplazadas o fuera de sus casas.
Es que las lluvias que han ocasionado esta tragedia en Brasil han sido calificadas por algunos como «las peores en la historia del país». De manera específica, medios como Folha de S.Paulo recuerdan que fue la mayor de todas las precipitaciones acumuladas en enero y febrero de 2022. Por ende, que en dos días llovió más que en dos meses de verano. También se indica, por ejemplo, que menos de 24 horas llovió más de 600 milímetros.
En medio de esta situación colmada por inundaciones, desplazamientos de tierras y afectación de servicios, continuaban las labores de búsqueda de sobrevivientes entre los escombros tras los derrumbes de viviendas debido a los aludes.
«La esperanza es lo último que muere, así que tenemos mucha esperanza», llegó a decir un empleado municipal de nombre Pedro de Rosario en declaraciones recogidas por la agencia AP. «Todavía hay gente enterrada», indicó a modo de ejemplo de perseverancia y ánimo tras una tragedia que enluta a Brasil.
Oración y ayuda a las víctimas
«Llevo a Dios mis oraciones por las víctimas de las fuertes lluvias en el litoral de São Paulo. Es hora de unirnos en la oración y en gestos efectivos de solidaridad, buscando apoyar a las familias en duelo, a las personas sin hogar, a todos los que sufren y quedan amenazados por el riesgo de inundaciones o deslizamientos de tierra», expresó el arzobispo de Belo Horizonte y presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), monseñor Walmor Oliveira de Azevedo.
Según recuerda la propia Iglesia de Brasil, desde la Arquidiócesis São Paulo, a través de Caritas Arquidiocesana de São Paulo (CASP), se está realizando una campaña de recaudación de fondos para ayudar a las víctimas de las fuertes lluvias
El arzobispo brasileño expresó consternación y tristeza por los efectos de este temporal y es por ello que se solicita el apoyo a esta campaña para ayudar a quienes tanto lo necesitan en este momento a través de la donación de ropa, alimentos, entre otros.
Más información para ayudar aquí