En Colombia, hace un año (21 de febrero de 2022), la Corte Constitucional legalizó el aborto hasta la semana 24 de gestación. La realidad es que en el país latinoamericano, en el cual una de las principales devociones es al Divino Niño, la vida de los niños por nacer está cada día más desprotegida.
Esta semana, los defensores de la vida se movilizaron en redes sociales bajo el hashtag #NadaQueCelebrar, para insistir en que lo nefasto de la decisión. Así lo resumió en Twitter Julieth Gómez, una mujer que trabaja por la familia y la vida:
«El genocidio de los niños por nacer no es algo que deba conmemorarse, por el contrario, hoy es un día para pedir perdón por el silencio que se extiende por los corazones pasivos y tranquilos ante el asesinato de niños en el vientre».
Por su parte, desde la Fundación Nazer Colombia también se manifestaron: «Hoy no hay #NadaQueCelebrar, porque la celebración será el día de que vivamos en una sociedad que respete el derecho a la vida independiente de su raza, sexo, condición, edad o etapa de gestación».
Otro de los comentarios en redes sociales dice: «En Colombia todos los días se asesina a cientos de niños, se les dice a sus madres que la elección de matar a su hijo es simple, gratuita y segura: y que es lo mejor que pueden hacer por sus propias vidas»( Juliana Cáceres).
Protestas por condecoración
En este marco y a propósito del aniversario, el Concejo de Bogotá condecoró a Profamilia, organización privada que promueve los derechos sexuales y reproductivos, que practica abortos y es considerada por los grupos provida como «una entidad que hace negocio con la muerte», como lo afirmó la Fundación Unidos por la Vida al protestar por el reconocimiento.
Ese mismo día, un grupo de ciudadanos se manifestó en la sede del Concejo de Bogotá, organismo que recientemente aprobó el acuerdo 023 para eliminar las barreras para el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo, una norma que sería la primera en el país, si la alcaldesa llegara a firmarla.
«No existe en la legislación colombiana un derecho fundamental a la “Interrupción Voluntaria del Embarazo”, o aborto, y el Congreso de la República, órgano competente para aprobar las leyes en nuestro país, no ha aprobado ningún Proyecto de Acto de Legislativo, o Ley Estatutaria que lo establezca como tal», aseguraron los congresistas de la bancada provida. Esto quiere decir que se extralimitó en sus funciones.
Sobre este acuerdo, el representante a la Cámara Luis Miguel López dijo que «atenta contra la libertad de los padres a educar sus hijos, incluso, promoviendo el aborto directa y abiertamente en el colegio». Y agregó: «Tenemos que estar muy preocupados con lo que está ocurriendo en el país, todos los días se está promoviendo el aborto, desde el gobierno nacional y ahora desde el Concejo de Bogotá».
Referendo Provida
Julián Hoyos, director General de la Fundación Conciudadanos en Colombia y Ecuador, escribió en su columna Los niños invisibles, publicada en la Revista Suroeste:
«Hoy, 21 de febrero, Colombia cumple un año desde aquella infame decisión de la Corte Constitucional que permitió el aborto libre hasta los seis meses de gestación. Para muchos, esto fue la muerte de una esperanza que ya venía agonizando… Y desde entonces, nos acompaña una parálisis, la sensación de que todo esfuerzo siempre va a chocar con el muro de nuestras instituciones fanatizadas a favor de la muerte».
Y dibuja el panorama completo así: «A la par de la Sentencia de la Corte, tenemos hoy una Resolución del Ministerio de Salud que ya nos saturó el sentido del escándalo. Aborto sin causales hasta el sexto mes, y si ya pasó el sexto mes, la causal salud —salud mental— sirve para todo. ¿Llanto fácil? Está usted en riesgo de afectación a su salud mental. Tenga aquí esta orden y pase a la otra sala por su aborto… ¿Menor de edad? ¿de 14 años? También puede abortar, y no se preocupe, sus padres no tienen que enterarse».
Sin embargo, sabe que hay esperanza y hace un llamado a los provida para salir de la parálisis: «¡Perdamos mil veces hasta que ganemos! ¡Insistamos y resistamos a la desesperanza, que el camino es de larguísimo aliento!».
Y en esa lucha siguen, mientras continúan con la recolección de firmas para el Referendo Provida, originado ante interpretación cada vez más restrictiva del derecho a la vida y la libertad de conciencia. Este referendo busca modificar la Constitución Política en tres puntos: el derecho constitucional de los colombianos que están por nacer, el derecho a nacer y la prevención del aborto y la libertad de conciencia.
El 15 de abril terminará la recolección de los tres millones de ciudadanos respaldando o más, labor que adelantan en todo el país y que es de fácil realización a través del formulario digital, la invitación es clara; «firma y salvemos dos vidas».