"Es una bronquitis infecciosa muy aguda", dijo el Papa Francisco el jueves 30 de noviembre al recibir a un grupo de expertos en salud que habían acudido al Vaticano para un simposio. El sábado anterior, sus audiencias habían sido canceladas debido a síntomas gripales, y el Papa se había sometido a un examen en el hospital Gemelli para descartar el riesgo de una posible infección pulmonar, según supimos esa tarde. En los días siguientes, su agenda se redujo, y el Papa incluso renunció al Ángelus del domingo, dejando que un prelado leyera su meditación a su lado.
El martes por la noche, la Santa Sede anunció finalmente que el Papa cancelaba su viaje a Dubai "con gran pesar". "El médico me ha dicho que no vaya a Dubai. La razón es que allí hace mucho calor, y se pasa del calor al aire acondicionado. Y eso, en esta situación bronquial, no funciona", se explicó después.
La serie de encuentros del Papa
Aunque acató la decisión del cuerpo médico, el Papa no escatimó esfuerzos para cumplir sus otros compromisos a lo largo de la semana. Por ejemplo, tras cancelar el lunes su encuentro con las víctimas francesas de abusos, cogió personalmente el teléfono para concertar otra audiencia para el día siguiente. El miércoles, el Papa presidió la audiencia general, dejando que un prelado leyera su catequesis, pero haciendo un llamamiento en favor de Tierra Santa.
El jueves, el jefe de la Iglesia católica tuvo no menos de nueve reuniones por la mañana, incluidos tres grupos. Estuvo presente, sonriente, y no dudó en bromear con sus invitados, a pesar de la persistencia de su inflamación pulmonar, que le impedía leer sus discursos.
Diciembre
Diciembre promete ser igual de ajetreado: el 8 de diciembre se espera al Obispo de Roma, como cada año, en la Plaza de España, en el centro de Roma, para un acto público de devoción en la fiesta de la Inmaculada Concepción. El año pasado fue un momento doloroso para el Papa, que derramó lágrimas al hablar del pueblo ucraniano. "Me hubiera gustado llevarte el agradecimiento del pueblo ucraniano por la paz", dijo a la Virgen María antes de interrumpirse, sacudido por los sollozos.
El 13 de diciembre, el Pontífice argentino celebrará el 33º aniversario de su ordenación sacerdotal, y el 17 de diciembre, su 87º cumpleaños. Pocos días después, presidirá las celebraciones de Navidad, para las que el Vaticano publicó esta semana el calendario oficial.
Celebraciones de Navidad:
El 24 de diciembre, el Papa Francisco celebrará la tradicional Misa de Nochebuena a las 19:30 horas en la Basílica de San Pedro. El 25 de diciembre, pronunciará la bendición "Urbi et Orbi" -a la ciudad y al mundo- desde el balcón central de la fachada de la basílica de San Pedro, a mediodía. El 31 de diciembre, Francisco rezará las Vísperas y el himno Te Deum en acción de gracias por el año transcurrido. El lunes 1 de enero, 57ª Jornada Mundial de la Paz, el 266º Papa celebrará una Misa a las 10: 00 horas en la basílica de San Pedro.
El 6 de enero, presidirá la Misa de la Epifanía, a las 10:00 horas, en la basílica de San Pedro. Por último, el domingo 7 de enero, con ocasión de la fiesta del Bautismo de Cristo, bautizará a los hijos de los empleados del Vaticano durante una Misa que se celebrará a las 9:30 horas en la Capilla Sixtina.
Evidentemente, el sucesor de Pedro querrá acudir a todas sus citas, si la salud se lo permite. En marzo fue hospitalizado por una neumonía aguda y en junio por una operación abdominal. En 2023, estos episodios dieron lugar a varias advertencias sobre la salud del Pontífice, que reanudó un intenso programa de trabajo cada vez que regresaba del hospital.