En el pleno de la sesión de la Cámara de Diputados argentina, y con su hijo recién nacido en brazos, la diputada nacional Camila Crescimbeni honró y homenajeó a las madres que padecieron la muerte perinatal de sus hijos.
Con lágrimas en sus ojos, y acompañada de la emoción y el homenaje de Diputados de todas las bancas, testimonió con su propia vida el dolor de la pérdida de un hijo poco antes del nacimiento, el hermano gemelo del que llevaba en brazos, y la importancia de brindar contención y apoyo a la madre en el duelo, así como la de dar identidad y respeto al niño fallecido.
Con su voto, y el de otros 275 diputados –sólo uno votó en contra-, obtuvo media sanción la ley que busca regularizar los procedimientos médicos frente al fallecimiento del bebé en el vientre materno y hasta 7 días después del parto.
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«Queremos seguir hablando de nuestros hijos»
«Espero que con este proyecto podamos ayudar a cientos de familias a sanar y que podamos visibilizar y hablar de estos temas, que generalmente están escondidos, porque uno siempre anhela la vida y no la muerte, pero cuando la muerte se vuelve parte de la vida no queremos ser unos parias, queremos seguir hablando de nuestros hijos tan amados», expresó la legisladora.
Muy emocionada, pero consciente de la importancia de compartir su experiencia, Crescimbeni recordó lo vivido meses atrás.
«A las 8 de la mañana, en un nuevo control, mi hijo Silvestre no tenía más latidos, esa fue la frase que toda madre que gesta que es lo más terrible que a uno le pueden decir», relató.
La diputada tuvo un muy cálido acompañamiento del Sanatorio Mater Dei, de las Hermanas de María de Schoenstatt, tanto en el dolor por la muerte de Silvestre, como en el acompañamiento de su hermanito Rufino durante los 40 días que permaneció en la Neonatología.
«Uno está en shock y no sabe sus derechos. Por ejemplo, yo no sabía que lo podía tener a Silvestre a upa. Y terminé haciendo un montón de cosas. Lo tuve cuatro horas encima, le cantamos, lo llamamos por su nombre, los abrazamos, lo vestimos», recordó, y puso de manifiesto que lo vivido, fruto de las buenas prácticas del hospital, está en el proyecto para que pueda ser propuesto en todas las maternidades del país.
Ley Johanna
El proyecto es conocido popularmente como Ley Johanna, en honor a la mamá de Ciro, quien un mes y medio antes de darlo a luz conoció que el corazón de su hijo ya no latía. Tuvo que esperar durante numerosas horas para la práctica de la cesárea rodeada de madres que vivían su preparto con alegría, y cuando fue a solicitar el cuerpo de su hijo se lo encontró en una caja azul de archivo como «NN».
Desde entonces, emprendió una lucha solidaria con mujeres que padecían la misma falta de apoyo y comprensión ante el momento vivido, y el desconocimiento de los derechos para transitar el duelo.
El proyecto fue presentado en 2017, en 2021, pero recién este año parece que logrará avanzar en el Congreso argentino. Resta ahora la aprobación de la Cámara de Senadores.
Johanna estaba en la Cámara cuando la diputada Crescimbeni relató lo vivido, y cuando los diputados votaron una ley que ayudaría a que otras mujeres no padezcan lo que ella vivió. Se trata de un proyecto que supone reconocimientos al niño por nacer, a la madre en el duelo, pero que requiere de mucha difusión y formación de los equipos médicos en todo el país.