San Expedito es conocido como el santo de las causas justas y urgentes; miles de leyendas rodean su historia, pero quizá la más conocida es la del milagro del agua, correspondiente a la época de Marco Aurelio.
Expedito conocía la historia de Jesús y se sentía conmovido por sus enseñanzas, pero como general romano encargado de perseguir a los cristianos, siempre posponía su conversión...
Un día, ante una batalla final, él y los soldados romanos, de rodillas, empezaron a rezar imitando a los cristianos para pedir a Dios una solución urgente.
Conoce el resto de la historia en este video.